
Todo empezó con tres de las bandas ganadoras de los pre-Cosquín.
Píxel, de Villa María –Córdoba- con su rock/pop poco tuvo que ver con el estilo del sector; Kingston Jam & the Cabaret Kaya Club, de Río Cuarto –Córdoba- ya se acercaba más a lo que la gente fue a buscar con su fusión de ska-reggae-rock; El Corte, de Río Grande –Tierra Del Fuego- tuvieron lo suyo con su música festiva.
La fecha continuó con dos bandas cordobesas. En primer lugar, los originales La Pata de la Tuerta, quienes con su combinación de ritmos balcánicos, jamaiquinos y latinoamericanos, sorprendieron a más de uno. Dale Roska, en cambio, fue mucho más directo con su ska bien al frente. Adelantaron melodías de su disco “La vidriera”, en donde giran por sus cadencias conocidas.
Mil Astillas es una agrupación que busca nuevos sonidos y que los adapta de buena forma dentro de una base reggae. Además de tocar composiciones de su CD debut, fusionó de manera interesante “Sweet Child O’Mine”, de Guns’n’Roses, y “En el último trago”, de Andrés Calamaro.
Pasando a las bandas más populares, Dancing Mood, la orquesta liderada por Hugo Lobo, arrancó con los shows convocantes. La gente pasó de estar cómodamente sentada
sobre el césped a danzar con el swing que entrega esta formidable agrupación. Como nunca antes, este escenario estaba atestado de espectadores que observaban con admiración a estos virtuosos.
Mientras Las Pelotas sonaban en el principal, el roots reggae de Riddim también recordaba a Alejandro Sokol en “Va a ser distinto”, canción que había grabado junto a ellos. Durante el resto del show recorrieron parte de su discografía en canciones como “Mirando”y “Puedo esperarte”. Riddim había dejado el lugar súper encendido para al artista más esperado.
Fidel Nadal está en un momento increíble, tanto desde lo musical, lo escénico y de la llegada al público. A su banda se la escuchó impecable y a él se lo vio muy comunicativo con sus fans. Su nuevo gran hit “International love” provocó el canto y el baile de todos, aunque las también recientes “Luz y compañía” y “No aceleres el tiempo” generaron lo suyo.
Otros con una gran cantidad de seguidores son los Resistencia Suburbana. Pese a que Los Piojos estaban mostrando lo suyo, ellos lograron mantener una gran base de fans por su lado. “Por cultivar marihuana”, “Si me dejas” y “El león”, algunas de las entonadas con mucho ímpetu. Esa mezcla de desfachatez con el reggae autóctono es lo que atrae y los diferencia del clásico sonido.
Píxel, de Villa María –Córdoba- con su rock/pop poco tuvo que ver con el estilo del sector; Kingston Jam & the Cabaret Kaya Club, de Río Cuarto –Córdoba- ya se acercaba más a lo que la gente fue a buscar con su fusión de ska-reggae-rock; El Corte, de Río Grande –Tierra Del Fuego- tuvieron lo suyo con su música festiva.
La fecha continuó con dos bandas cordobesas. En primer lugar, los originales La Pata de la Tuerta, quienes con su combinación de ritmos balcánicos, jamaiquinos y latinoamericanos, sorprendieron a más de uno. Dale Roska, en cambio, fue mucho más directo con su ska bien al frente. Adelantaron melodías de su disco “La vidriera”, en donde giran por sus cadencias conocidas.
Mil Astillas es una agrupación que busca nuevos sonidos y que los adapta de buena forma dentro de una base reggae. Además de tocar composiciones de su CD debut, fusionó de manera interesante “Sweet Child O’Mine”, de Guns’n’Roses, y “En el último trago”, de Andrés Calamaro.
Pasando a las bandas más populares, Dancing Mood, la orquesta liderada por Hugo Lobo, arrancó con los shows convocantes. La gente pasó de estar cómodamente sentada
Mientras Las Pelotas sonaban en el principal, el roots reggae de Riddim también recordaba a Alejandro Sokol en “Va a ser distinto”, canción que había grabado junto a ellos. Durante el resto del show recorrieron parte de su discografía en canciones como “Mirando”y “Puedo esperarte”. Riddim había dejado el lugar súper encendido para al artista más esperado.
Fidel Nadal está en un momento increíble, tanto desde lo musical, lo escénico y de la llegada al público. A su banda se la escuchó impecable y a él se lo vio muy comunicativo con sus fans. Su nuevo gran hit “International love” provocó el canto y el baile de todos, aunque las también recientes “Luz y compañía” y “No aceleres el tiempo” generaron lo suyo.
Otros con una gran cantidad de seguidores son los Resistencia Suburbana. Pese a que Los Piojos estaban mostrando lo suyo, ellos lograron mantener una gran base de fans por su lado. “Por cultivar marihuana”, “Si me dejas” y “El león”, algunas de las entonadas con mucho ímpetu. Esa mezcla de desfachatez con el reggae autóctono es lo que atrae y los diferencia del clásico sonido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar